Una cincuantena de escuelas e institutos catalenes se analizarán con lupa durante dos cursos para saber cómo evoluciona la pandemia y, a partir de los datos que se extraigan, dar la mejor respuesta a la COVID-10 desde los centros educativos. «Será una auditoria constante para ver si las medidas sanitarias que aplicamos en los centros educativos, los tenemos que flexibilizar o tenemos que ser más rígidos», ha explicado el directo general de Investigación e Innovación en Salud, Robert Fabregat. El proyecto, que se llama Escoles Sentinella, elegirá 50 centros «representativos» del país que cuenten con el compromiso y la voluntariedad de las direcciones escolares.
En estos centros es realizarán todo tipo de pruebas (PCR, automostreo y pruebas rápidas) a alumnas, alumnos y docentes tanto a principio de curso como también a lo largo del curso para hacer un seguimiento de casos individuales y de contactos estrechos. Además, se pasarán encuestas una vez cada trimestre para saber la actitud y la conducta de la comunidad educativa hacia el virus, con el objetivo de preparar un informe cada seis meses e «ir adaptando» las medidas que sean necesarias según la situación epidemiológica. Gracias a la información que se extraiga, que se podrá «extrapolar» al conjunto de la población escolar, Salud espera «poder estimar la evolución de la pandemia» y «optimizar los protocolos y la planificación sanitaria» en los centros educativos.
El director del Centro de Estudios Epidemiológicos sobre las Infecciones de Transmisión Sexual y Sida de Catalunya (CEEISCAT), Jordi Casabona, ha explicado que el concepto de problación centinella está muy «consolidado» porque sirve para ver qué le passa a la población a partir de lo que se detecta en grupos más pequeños. El estudio permitirá saber, por ejemplo, como se deben ventilar los espacios de un centro o qué características comparten los y las menores que se hayan infectado.
Para tirar hacia delante este proyecto, Salud se ha aliado con el Departament de Educación «Las escuelas serán el lugar más seguro para nuestras niñas, niños y jóvenes después de casa», ha vuelto a afirmar Bargalló, quien ha insistido que «no hay ningún motivo por el que las escuelas no estén abiertas».
Font: Ara.cat